Infecciones Nosocomiales

En este importante simposio se presentan algunos artículos sobre uno de los grandes problemas de la medicina actual: la resistencia a los antibióticos.

Con la aparición de la penicilina y de otros antibióticos, en la década de 1940 y 1950, se creyó que se había logrado desarrollar nuevas armas para vencer a los diversos microorganismos que causan muchas dolencias infecciosas, algunas de gran mortalidad. Pero al poco tiempo muchos de los gérmenes empezaron a desarrollar resistencia a los antibióticos, y hoy en día se ha extendido peligro- samente y constituye una grave y preocupante amenaza para la salud humana. La resistencia a los antibióticos se define como la falla en el control de la terapia antibiótica instaurada clínicamente. En el laboratorio se explica como el aumento de la concentración inhibitoria mínima (CIM) en, por lo menos, dos diluciones. Entre los factores que favorecen la selección y la diseminación de los genes que confieren resistencia, tenemos;

1- El uso irracional e indiscriminado de diversas drogas antibacterianas (tiempo prolongado, profilaxis antibiótica innecesaria, antibióticos de amplio espectro).

2- El uso de antibióticos en la alimentación de animales (se estima que el 50 por ciento de toda la producción de antibióticos se usa para tratar anima- les enfermos).

3- El aumento de pacientes con enfermedades debilitantes como el SIDA, transplantados, etc. los cuales se complican con diversos gérmenes oportunistas que obligan el uso de antibióticos de amplio espectro, lo que agrava la resistencia.

El problema de la resistencia antibiótica es que causa más tiempo de hospitalización, mayor severidad y riesgo de muerte, aumenta la incidencia de superinfecciones (bacterianas y micóticas) y aumenta los costos.

A nivel comunitario los problemas detectados de resistencia antibiótico se están presentando en
forma creciente y son a los siguientes gérmenes: Pneumococcus resistente a penicilina y a otros antibióticos (multiresistente), Haemophilus influenzae, especies de Neisseria, Estreptococo A, Shigella y Salmonella, etc. etc.

En países en vías de desarrollo cada año ocurren más de 4 millones de muertes por infecciones agudas de las vías respiratorias. El mayor responsable es el Streptococcus pneumoniae.

Así en los Estados Unidos de Norteamérica hay diversos reportes del incremento de la resistencia, de éste modo la prevalencia de S. pneumoniae resistente a la penicilina se triplicó en un lapso de tan sólo 4 años; de 5.6% en 1992 a 16.4% en 1996.

En un último estudio en San Francisco (USA) cerca del 50% de los neumococos invasivos fueron en pacientes con VIH, y tuvieron una letalidad 7.8 veces más; muchas de estas cepas fueron altamente resistentes a la penicilina.

Whitney publica un interesante artículo en el que llama la atención del incremento importante en los Estados Unidos de Norteamérica de cepas de neumococo multidrogoresistente (penicilina, cefotaxima, meropenem, eritromicina y cotrimoxazol, etc.). En otros países, como España y Francia se han reportado resistencia a la penicilina en más del 40% de las cepas de S. pneumoniae.

En el Perú, felizmente varios estudios informan que el S. pneumoniae en más del 90% es sensible a la penicilina, así, Ochoa en 1998, estudiando niños que acudían a consultorio externo del Hospital Nacional Cayetano Heredia, encontró sólo un 5% de resistencia.

En otros pocos estudios la resistencia del S. pneumoniae no se limita a la penicilina, sino que se
ha documentado el surgimiento de cepas multi- resistentes a fármacos además de la penicilina, tales como las cefalosporinas (segunda y tercera), cloramfenicol, eritromicina, tetraciclinas, cotrimo-xazol, etc.

A nivel de las infecciones intrahospitalarias, los problemas actuales son:

1.- Gérmenes gramnegativos multiresis- tentes: Existen diferentes variantes:
Betalactamasas (BL) comunes, B-lactamasas de espectro expandido o ampliado (ESBL), que es capaz de destruir a las cefalosporinas de tercera generación y los monobactámicos, descrita especialmente para Klebsiella pneumoniae, BL-resistente a inhibidores tipo Sulbactan y Tazobactan, BL cromosomiales del tipo Ampc, que no actúa sobre Imipenen y Cefepime, BL sobre Carbapemenasas, etc.

2.- Gérmenes grampositivos: estafilococo resistente a meticilina, enterococo resistente a aminoglicósidos, a betalactámicos y glicopéptidos.

A nivel intrahospitalario de los gérmenes grampositivos, los estafilocococo meticilinore- sistentes (MRSA) son un gran problema debido a que los clásicos antibióticos betalactámicos y algunos nuevos no actúan y sólo responden a los glycopéptidos o al Linezolid; Echevarria en Lima estudiando 423 cepas de Staphyloccocus sp intrahospitalaria, detectó en 6 centros (4 Minsa, 1 FFAA, 1 del IPSS) un 58% de MRSA, lo que nos debe causar una gran preocupación. En este simposio se presenta un artículo interesante sobre este problema.

Los enterococos son una causa frecuente de infección nosocomial (12%), especialmente las causadas por las especies E. Faecalis y E. Faecium, habitualmente presentan resistencia intrínseca a antibióticos del tipo de las cefalosporinas y las quinolonas, habiéndose descrito últimamente la aparición de resistencia adquirida a la vancomicina (VRE).

En una última publicación del 2000, realizado en los Estados Unidos de Norteamérica el Dr. Wallace detectó un 80% de resistencia a la meticilina por los estafilococos coagulasa negativo, un 30% de resistencia a los estafilococos dorados y en forma preocupante un 20% a los enterococos resistentes a vancomicina.

La Dra Maria Neyra, Directora del Programa de Control, Prevención y Erradicación de las Enfermedades Infecciosas de la OMS ha señalado "Nuestro temor radica en que en el año 2010 tengamos que decir a la gente que tomen extractos de raíces de plantas, porque los medicamentos han dejado de funcionar".

La aparición de resistencia a los antibióticos es posible controlar a través de una estricta vigilancia epidemiológica la cual se debe llevar a través de los comités de control de las infecciones nosocomiales.

Diversos estudios realizados por estos comités demuestran que con medidas sencillas de higiene, uso racional de antibióticos, etc, disminuyen en forma significativa muchas de las infecciones graves asociadas a las infecciones resistentes a los antibióticos.

Dr. Ciro Maguiña Vargas
Profesor Principal de la Universidad Peruana
Cayetano Heredia. Especialista en enfermedades infecciosas tropicales y dermatología.

Bibliografía

1. Ochoa, T. Resistencia de Streptococcus pneumoniae a penicilina en portadores nasofaríngeos menores de dos años. Rev Med Herediana 1998; 9(2):56-62.
2. Turett, GS; Blum, S; Fazal, BA; Justman, JE. and Telzak, EE. Penicillin resistance and other predictors of mortality in pneumococcal bacteremia in a population with high human immunodeficiency virus seroprevalence Clin Infect Dis 1999;29:321-327.
3. Wenzel and Edmond. Managing Antibiotic Resistance. NEJM 2000;343(26):1961.
4. Edmond, MB; Wallace, SE; McClish, DK; Pfaller, MA; Jones, RN. and Wenzel, RP. Nosocomial bloodstream infections in United States hospitals a three-year analysisis. Clin Infect Dis 1999;29:239-244.
5. Whitney, CG; Farley, M; Hadler, J. and Harrison, L. et al. Increasing Prevalence of Multidrug-Resistant Streptococcus pneumoniae in the United States. NEJM 2000;343(26):1917.
6. Guzmán-Blanco, M; Casellas, JM. and Silva, H. Baterial Resistance to antimicrobial agents in Latinamérica. Infectious Disease