DERMATOLOGíA (Tercera Parte)

Melasma: Tratamiento Dermocosmiátricol

Dra. Betty Sandoval Angelino (*)

Melasma

Melasma, derivado del griego melas (que significa negro), es el término utilizado para describir una hiperpig-mentación de color castaño, localizada en la cara. Son manchas distribuidas de forma simétrica, irregular, que pueden confundirse con la piel normal o bien presentar un límite preciso (1,2). Aunque no respeta raza ni sexo es más frecuente en mujeres de origen hispano y habitantes de países tropicales. Los hombres se afectan esporádicamente, con las mismas características clínicas que las mujeres, aunque se observa historia familiar en el 70% de los casos (1,13).

El melasma es considerado como una de las patologías dermatológicas de más difícil tratamiento (1,13).

Esto podría ser explicado por tratarse de un trastorno de causas multifactoriales que por diversos estímulos puede llegar a manifestarse en determinado momento. Así aún cuando la predisposición a desarrollar ésta hiperpig-mentación es congénita en la mujer no se manifiesta sino hasta que el estrógeno comienza a circular en la adolescencia (1,13).

Patrones clínicos del melasma

Existen 3 patrones clínicos de melasma (1,2):

- Patrón Centrofacial. Afecta mejillas, frente, labio superior y mentón. Es el observado en la mayoría de los casos (Figura 1).
- Patrón Malar; afecta mejillas y nariz. Es el segundo en orden de frecuencia.
- Patrón Mandibular; Afecta sólo rama mandibular. Es el menos frecuente.

FIGURA 1
Patrón histológico

Patrón histológico

Histológicamente existen patrones atendiendo a la localización del pigmento (1,13):

1) Epidérmico
2) Dérmico
3) Mixto

Medios auxiliares

La luz de Wood ayuda a distinguir la distribución y el nivel del cambio pigmentario (1,2,3) (Tabla 1). Este dato nos orientará hacia la futura respuesta terapéutica.

TABLA 1

Patogénesis

En su patogénesis han sido implicados múltiples factores (13):
1. Anticonceptivos orales
2. Embarazo
3. Cosméticos
4. Genéticos
5. Endocrinos

Los altos niveles de estrógeno proveniente de anticonceptivos orales y el aumento de éstos durante el embarazo pueden agudizar o agravar la situación (melanoderma gravidarum) (1,13).

Es evidente que la luz solar desempeña un papel importante; así se explicaría la localización electiva en zonas fotoexpuestas y su reversibilidad en muchas ocasio- nes, durante el invierno (1,13).

Tratamiento

El tratamiento para las manchas es la exfoliación de la piel removiendo así las células manchadas, dando oportunidad que nuevas células se formen más rápido que el ciclo normal de intercambio (3,6).

1. Medidas generales

Fotoprotección. Es obligado el uso de pantalla solar antes de iniciar cualquier tratamiento específico y conti-nuarlo después. Las pantallas solares físicas son más efectivas que las químicas en la disminución de aparición de melasma. Se recomienda protectores solares mayor de 15 media hora antes de exposición al sol (1,13).

-Camuflaje cosmético. No debemos olvidar la importancia de los cosméticos como camuflaje. El paciente familiarizado con estas técnicas puede disimular trastornos de pigmentación localizados o utilizarlos como tratamiento complementario (9,10). Maquillajes cubrientes del tipo de Covermark o Dermablend hacen menos aparente el trastorno incorporando protección solar, ya que son bases opacas resistentes al agua (1,13).

2. Agentes depigmentantes

En relación a agentes despigmentantes existen una amplia gama de agentes químicos despigmentantes. Todos éstos agentes permiten blanquear la piel, muchas veces sólo en forma temporal, siendo bastante frecuente la reaparición del melasma al poco tiempo de suspender el tratamiento (4,5).

Dentro de los despigmentantes que existen en el mercado, tenemos los siguientes:
Hidroquinona Ác. Fítico
Á c. Kójico Ác. Glicólico
Arbutín Tretinoína

Éstos productos son manejados por dermatólogos, se hacen formulaciones tópicas o lo podemos encontrar en productos comerciales ya preparados.

Quizás cabe mencionar que la hidroquinona a pesar de ser un producto químico muy antiguo (2,11) sigue siendo uno de los mejores despigmentantes que contamos actualmente a pesar que siguen saliendo nuevos despigmentantes.

Con el empleo de estos agentes es necesario tener algunas precauciones (2,11).:

-Evitar las sustancias capaces de originar una leuco-dermia química como consecuencia de la destrucción y pérdida permanente de melanocitos. pueden causar despig-mentación satélite en confetti (a distancia del lugar de aplicación).

- Es recomendable el uso nocturno de estas sustancias.
- Uso permanente de protectores solares durante el día.

3. Peeling Químico (8,11,12)

Es una alternativa de tratamiento ideal para el melasma. También ayuda para pecas, léntigo e hiperpig-mentación posinflamatoria.

El peeling químico es un procedimiento sencillo se realiza en consultorio por dermatólogos forma parte del tratamiento complementario del melasma.
Es la aplicación de una sustancia química en la piel ocasionando exfoliación en piel y recambio cutáneo. Se obtiene una piel más blanca y se reemplaza epidermis pigmentada con piel nueva (6,7,8).

Dentro de las sustancias químicas que se utilizan tenemos:
a) Ác. Salicílico: 10-15 %
b) Ác. Glicólico: 30-50 %
c) Solución de Jessner
(Ác. Salicílico, Resorsina, Ác. Láctico).
d) Microcristales
e) Ác. Aminados de fruta

4. Los peeling se realizan cada 2 semanas; durante el tratamiento el paciente puede seguir sus actividades normales y las mujeres pueden seguir maquillándose sin ningún problema (8,11,12).

Se concluye que con los adelantos en la dermatología hoy día no hay razón por la cual una persona debe sufrir la vergüenza y estigma de tener la piel manchada. El tratamien-to es fácil, sin complicaciones y de precio razonable.


Bibliografía

  1. Mosher, DB; Fitzpatrick, TB; Hori, Y. et al. Disorders of pigmentation. In: Fitpatrick Tb, et al, eds. Dermatology in general medicine, 4.a.ed. NY:McGraw Hill; 1993;903-95.
  2. Vásquez, M; Maldonado, H; Benaman, C; Sánchez, JL. Melasma in men: a clinical and histologic study. Int J Dermatol 1988;27:25-7.
  3. Van DER Steen, P; Happle, R. Dyschromia en confetti as a side effect of topical immunotherapy with diphenylcyclopropenone. Arch Dermatol 1992;128:518-20.
  4. Drakela; Dinehart, SM; Golts, RW, et al. Guidelines of care for chemical peeling. J Am Acad Dermatol. 1995;33:497-503.
  5. Lim, JTE; Tham, SN. Glycolic acid peels in the treatment of melasma among Asian women. Dermatol Surg. 1997;23:177-9.
  6. Klein, M. Amino Fruit acids: the new cosmeceutical. Cosmetic dermatology 2000:25-8.
  7. Murad, H; Shamban, AT; Moy, LS; Moy, RL. Study shows that acne improves with glycolic acid regimen. Cosm Dermatol. 1992;5:32-5.
  8. Murad, H; Shamban, A; Scott Premo, P. The use of glycolic acid as a peeling agent. Dermatol Clin. 1995;13:285-307.
  9. Van Scott, EJ; Yu, RJ. Alpha hydroxy acids: therapeutic potentials. Can J Dermatol. 1989;1:2108-12.
  10. Van Scott, EJ; Yu, RJ. Alpha hydroxy acids; procedure for use in clinical practice. Cutis. 1989; 43:222-8.
  11. Lim, JTE; Than, SN. Glycolic acid peels in the treatment of melasma among Asian women. Dermatol Surg. 1997;23:177-9.
  12. Coleman, WP III, Futrell JM. The glycolic acid trichloroacetic acid peel. J Dermatol Surg Oncol. 1994;20:76-80.
  13. Fitzpatrick, TB; Eisen, AZ; Wolff, K; Freedberg, IN, Austen, KF. Alteraciones de la pigmentación. Dermatolo- gía en medicina general 3era edición. 1998; 930-92.

 

(*) Jefe de Servici de Dermatología del Hospital Grau-EsSalud